El alcalde de la ciudad, Javier Lacalle ha restado importancia al retraso de varios meses que están sufriendo las obras de la enfermería del Coliseum, que deberían haber estado entregadas el pasado mes de junio.
En este sentido, ha señalado que estas obras no afectan a la actividad normal de funcionamiento de esta instalación, al tiempo que ha asegurado no conocer su fecha de finalización.
El alcalde no ha querido pronunciarse acerca de si la empresa responsable de las obras, será sancionada por el retraso de las mismas, además de que ha expresado su confianza en que los trabajos se desarrollen con normalidad y concluyan como deben.
Al respecto, ha aseverado que si "de él hubiera dependido el Coliseum no hubiera contado con una enfermería permanente, ya que la actividad taurina es residual que se circunscribe a cinco días al año, algo que se puede solventar con una enfermería portátil, tal y como se ha hecho en las últimas Ferias Taurinas", pero como es obligatorio, el recinto debe disponer de ella.