El alcalde de Burgos, Javier Lacalle ha visitado el primer edificio construido en la ciudad bajo los parámetros Passivhaus situado en la calle Tahonas.
El alcalde de Burgos, Javier Lacalle ha visitado el primer edificio construido en la ciudad bajo los parámetros Passivhaus situado en la calle Tahonas.
Desde el Ayuntamiento se quiere incentivar la construcción de las viviendas bajo estos parámetros de eficiencia energética tipo A, cuando las demás casas tiene el C o D. Debido a esto, el Ayuntamiento va a promover una bonificación en el IBI y el ICIO para aquellas viviendas que cumplan estos parámetros.
Se trata de una apuesta importante y decidida por parte de la Administración Local, que en palabras de Lacalle tiene que establecer mecanismos para que cada vez se construyan más edificios bajo estos parámetros. Además se va a hacer un estudio en colaboración con la Universidad de Buró para medir la situación energética de todos los e4dificios municipales.
La representante de la Plataforma de Edificación Passivhaus, Adelina Uriarte ha comentado que el coste de este tipo de edificaciones se tiene que percibir más como un aliciente debido a que bajan los porcentajes de emisión de dióxido de carbono considerablemente.
Por su parte uno de los arquitectos y promotores de esta obra, Bruno Gutiérrez ha indicado que el edificio sito en la calle Tahonas cuenta con los 5 principios básicos del estándar Passivhaus. El edificio cuenta con un elevado aislante térmico, ausencia total de puentes térmicos, carptintería y vidrios de altas prestaciones, ventilación mecánica con recuperador de calor y hermetismo total.
Gutiérrez ha indicado que el edificio está pensado para que prácticamente no necesite calefacción. El coste de este tipo de edificios aumenta entre un 5 y un 10% que a la larga se recupera a través de las bonificaciones.
Además ha adelantado que en 2020 se empezarán a construir en la zona de Boulevard dos edificios con 200 viviendas bajo estos parámetros.
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