Arranca en Burgos una campaña de Seguridad Vial contra los atropellos: 'Solo tenemos una vida'

'Solo tenemos una vida' buscará pacificar el tráfico y construir una ciudad amable y respetuosa con las normas, ya que Atestados de la Policía Local considera que las causas no han sido en ningún caso el exceso de velocidad, sino despistes del conductor. La campaña tiene un coste de 20.000 euros y se desarrollará durante "15 días intensivos".

La realidad es que perder de vista la carretera y sus agentes de movilidad supone "jugarse la vida" y solo tenemos una, ha recalcado De la Rosa, porque las cifras no son normales.

Es importante que conductores y peatones tengan mayor concentración, por ambas partes, ya que hay "exceso de confianza" en los peatones, considera. También es posible que salir de la pandemia haya acelerado la vida de las personas, o que haya generado más individualidad, ha comentado.

Se lanzará en todos los soportes municipales, como mupis, pantallas digitales, así como medios de comunicación y redes sociales. También se escribirán leyendas en las franjas de los pasos, como podría ser "No cruces hasta que se detengan". Se pintarán de nuevo la señalética horizontal y también renovarán las verticales.

Esta campaña nace con el objetivo de mejorar la convivencia desde la pedagogía y la educación, para todos los vehículos implicados, también bicicletas o VMP. El conductor, sea quien sea, tiene que preocuparse de no generar riesgo y generar convivencia, también entre turismos y bicicletas.

Para ello hay que rebajar la velocidad. Radares y los 'foto rojo' seguirán "concienciando" porque "la ciudad está preparada para sancionar". Y es que la nueva ley que regula a 30 kilómetros/hora algunas vías, no se ha sabido respetar y el periodo de adaptación ya ha terminado. De la Rosa no cree que se cumplan las velocidades, tampoco en los ciclocarriles.

De tal manera que, "solamente tocando el bolsillo llamas la atención a un comportamiento irregular".

"La norma hay que cumplirla", ha sentenciado, porque la nueva Ordenanza de Movilidad y los corredores ciclistas están para quedarse. Habrá más carriles segregados para bicicletas, no obstante, habrá que convivir con aceras bici, pero no será la política prioritaria.

A mayores, continuarán buscando reducir la velocidad, porque de lo contrario no se da seguridad suficiente a los ciclistas, para ello también será fundamental la labor de la Policía Local, a la que se han incorporado ocho agentes.

También están sobre la mesa la subvención con MITMA II de 50 cruces inteligentes, que podría llegar. Hasta ese momento hay que poner medidas, como los 24 nuevos pasos dinámicos: avenida Castilla y León, Obdulio Fernández, Bulevar, Alcalde Martín Cobos o Islas Baleares.

A medida que se pueda, se tratará de financiar más de ellos, al igual que los pasos elevados, que podrían ser mejor la solución para frenar los atropellos. También la mejora de la iluminación o señalización.

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