La modificación del PGOU sale adelante

En la sesión plenaria de este viernes 17 de marzo, los concejales de la oposición han afeado al equipo de Gobierno que hayan remitido este documento con cuatro días de antelación para su análisis, y han recordado que con esto se cumple una sentencia de TSJ que obligaba al Ayuntamiento a anular cuatro desarrollos (388 hectáreas) que ahora pasan a calificación de suelo rústico y disminuyen la edificabilidad en 14.400 viviendas, porque el crecimiento de la ciudad no ha sido el esperado.

Desde Vox, Fernando Martínez-Acitores, también ha lamentado que se haya ido retrasando su aprobación hasta ahora, a dos meses de las elecciones. Sobre el documento en sí, lo alaba, pero reconoce que le preocupa el olvido del Centro de Actividades Económicas (CAE) o cómo se va a poder regular que sea el Ayuntamiento el encargado del mantenimiento de espacios privados de uso publico, entre otras cosas.

Por ejemplo porque no se contempla que el subsuelo de estos espacios pueden tener garajes, y estos deben ser responsabilidad de los propietarios, han apuntado desde el PP.

La portavoz de los populares, Carolina Blasco, ha recordado que en 2018 se empezó con la contratación de este estudio tras la sentencia del TSJ, porque lo planificado no servía. Pero desde entonces han pasado cinco años hasta que ahora se ha aprobado inicialmente el Plan.

Blasco se ha referido concretamente a la modificación que hace el PGOU en la ordenación de la Milanera, planteando ahí suelo residencial y abandonando la idea de edificar ahí el recinto ferial.

Para Podemos el Plan hasta hora ha sido un caos y no ha trabajo en la "ciudad de los 15 minutos" sino en función del lobby del ladrillo y generando "calvas" en Burgos, ha lamentado Marga Arroyo.

Garabito ha respondido a Vox sobre el cambio de calificación del suelo en el CAE, si bien antes era reconocido como industrial, ahora lo será rústico de entorno urbano, pero no se anula la creación del CAE. Lo que ha pasado es que el proyecto "murió" y con esta modificación se proyectan cuatro millones de metros cuadrados para impulsar el entorno.

En el Plan además se recoge que las cocheras de autobuses son suelo residencial y deberán mudarse al polígono, pero el grupo del PP se ha mostrado en contra del cambio de ubicación. Garabito les ha recordado que fue Javier Lacalle quien consideró que el cambio sí era oportuno.

Finalmente, con los votos del Gobierno Local y Podemos se ha aprobado el PGOU.

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