El nuevo curso escolar arranca con grandes cambios para Castilla y León, aunque también para Burgos. Un total de tres centros educativos cierran este año por falta de alumnos matriculados. Éstos son Araúzo de Miel, Villalmanzo y Castrillo de Don Juan, que estaba asociado con la provincia.
En este sentido, el delegado territorial, Roberto Saiz, apunta que no se trata de una cuestión de rentabilidad, sino de despoblación. El cupo mínimo debe ser de tres alumnos matriculados, siempre y cuando haya opción de un cuarto al próximo año.
El jefe del Área de Inspección Educativa, Daniel Gallo, aclara que no se ha dado esta situación para el presente curso y por ese motivo, han cerrado los tres centros mencionados.
Sin embargo, en el lado opuesto de la balanza, el alumnado ha incrementado en 443. Si bien Educación Infantil ha descendido en matriculados, Formación Profesional y nuevas ofertas educativas han aumentado.
Para poder llevar a cabo toda esta nueva oferta es necesario el profesorado, que disminuye en 5 docentes, pero incorpora a 253 en prácticas. Una medida que trata de "reducir las tasas de temporalidad", señala el delegado.
Otro de los grandes cambios en este año escolar se refiere a las infraestructuras y obras. El IES 'Alfoz de Lara' tiene aprobado y adjudicado el contrato de 644.520 euros para ampliar las aulas y los espacios complementarios.
Además, en el colegio de Villimar está previsto que el proyecto de obra se apruebe en septiembre con más de 4.872.950€. Por su parte, el colegio 'Antonio Machado' ya está operativo y funciona "con plena normalidad".
20:55
18:01