Se trata de una de las noches más mágicas del año, quizás la más esperada por los más pequeños de la casa, y apenas restan horas para que se produzca
Este viernes, 5 de enero, desde las seis de la tarde, miles de niños, acompañados por sus padres, saldrán a las calles de Burgos para recibir a la comitiva de sus Majestades los Reyes Magos, que estarán acompañados por cerca de 700 personas, entre voluntarios y personal municipal de limpieza, protección civil o seguridad, según ha anunciado el alcalde de Burgos, Javier Lacalle.
La salida tendrá lugar a las seis de la tarde en la avenida Eladio Perlado, subirá hasta la Antigua y bajará por la calle Vitoria, finalizando en la plaza del Cid, donde sus Majestades adorarán a la figura del Niño Jesús y saludarán a la multitud desde el balcón del Teatro Principal, como es costumbre.
Este año se aumenta el número de compañías y colectivos, hasta las 23, entre las que se incluyen dos procedentes de Francia, con sendos espectáculos muy visuales, alguno de ellos procedente del parque de Eurodisney, y con marionetas gigantes, además de las locales como Bambalúa Teatro, Innovarte, Ronco Teatro o Burgosalsón.
Además, se aumenta el número de carrozas; junto a las tres de los Reyes Magos y otras tantas de sus Pajes, se incluyen este 2018 las premiadas en el desfile de los pasados Sampedros hasta alcanzar las 11.
Además, el alcalde ha anunciado otra novedad, referente a las tres carrozas de los Reyes Magos, y que este año el trono donde se sientan se elevará por encima de lo normal hasta alcanzar los cuatro metros.
Además, y según ha explicado una de las técnico del área de Festejos, se vuelve a repetir la tradición que lleva a sus Majestades a residencias de ancianos o al propio Hospital Universitario, este viernes por la mañana.
Con los preparativos a punto, las carrozas listas para salir a la calle y las cartas a los Reyes Magos ya enviadas, solo queda esperar hasta las seis de la tarde para ver desfilar a los Magos de Oriente.
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