FERIA DEL LIBRO
La lluvia no hace mella en La Feria del Libro 2023, que va camino de superar las ventas del año pasado
Las casetas se encuentran ubicadas en la Plaza Mayor de la capital burgalesa hasta el día 4 de junio
31/05/2023 - 13:10h.
La Feria del Libro es un evento cultural consolidado que lleva celebrándose en Burgos cas cincuenta años. En esta ocasión, en la 47ª edición, el programa es muy variopinto, ofreciendo propuestas tanto para adultos como para niños. Tras visitar alguna que otra caseta y habiendo hablado con sus representantes, hemos conocido la situación de este año, que parece que pese a las inclemencias meteorológicas está más cerca del éxito que todo lo contrario.
Y precisamente por ese inconveniente hemos comenzado preguntando, ya que la Feria del año pasado tuvo que ser suspendida debido a la lluvia.
El mal tiempo da una tregua
Este año parece que el buen tiempo acompaña, a pesar de que el lunes 29 (el día de la tormenta y la tromba de agua) se vieron obligados a cerrar media hora antes. No obstante, la Feria se está desarrollando con normalidad y con muy buenos resultados, según ha explicado Nathays Henríquez, de la caseta de la Institución Fernán González.
Ha comentado que las previsiones meteorológicas se van cumpliendo y que lo que atrae a los compradores y curiosos es el sol y el "calorcito", por lo que las lluvias puntuales no han ensombrecido el esplendor del evento.
Balance positivo en ventas
Con respecto al año 2022 y estando todavía a mitad de Feria (recordemos que aún faltan unos días para que se dé por clausurada), de media en este punto las ventas de la muestra son mayores que en comparación al año pasado, lo que augura un balance muy bueno para los libreros.
El fin de semana les ha ayudado, como ha expresado Ana María Gundín, de la librería Luz y Vida, y ha acudido bastante gente. En rasgos generales, el volumen de ventas es positivo y tangible a estas alturas de la Feria, ha asegurado.
Perfil del lector
Si bien es cierto que hay una amplia variedad de casetas con temática específica destinada a un determinado target de la población, el espectro del perfil del lector burgalés es bastante amplio, donde acuden desde niños, pasando por adolescentes y jóvenes, hasta adultos y mayores. Cada caseta vende una clase de libro, como han manifestado las hermanas Celia y Sofía Beato, situadas en la caseta de la Universidad de Burgos.
La gente que visita esta es "un poco más mayor", pues vienen buscando cosas más específicas, ha apuntado Sofía, a lo que su hermana ha añadido que también van jóvenes que están terminando el TFG o realizando proyectos de investigación donde sus libros, de temática divulgativa o didáctica, son de gran ayuda.
Algo similar ocurre en la caseta de Nathays, donde ofrece libros relacionados con la historia o el arte; normalmente enfocados a un público más adulto. Sin embargo, ha señalado que en la diversidad está el enriquecimiento, por lo que en la Feria hay puestos para todo el mundo.
¿El ebook es de verdad una amenaza?
La respuesta es no. Todos los libreros han coincidido en que realmente depende de la persona, pero que comparar un libro electrónico con uno físico no tiene parangón. "La experiencia no es la misma", han concordado todos. "Hay gente a la que le gusta mucho el papel y toquetear un libro, y si la gente quiere un libro le compra", ha puntualizado Celia. No obstante, el precio del palpable sí que dista en ocasiones mucho del digital, ya que en Internet se puede encontrar más barato.
Cierto es que durante la pandemia los hábitos lectores se dispararon, como ha explicado Ana María, y la gente volvió a retomar el contacto con los libros físicos, frente a una tendencia del ebook al que le costará desbancar al libro tradicional.