El Burgos suma un heroico empate en Butarque tras aguantar más de 70 minutos con un hombre menos por expulsión de Grego Sierra.
Empate que sabe a victoria. El Burgos supo sufrir y aguantar a uno de los equipos favoritos de LaLiga Smartbank, que se estrelló una y otra vez ante un muro defensivo bien dispuesto por el técnico Julián Calero. El equipo blanquinegro suma su primer punto en la competición en un partido intenso y de poco fútbol, en el que destacó especialmente su guardameta Alfonso Herrero, que con sus intervenciones hizo posible sumar un punto muy importante, no tanto en la clasificación como en la moral y confianza de los jugadores.
El partido comenzó equilibrado, con el Burgos bien posicionado en el terreno de juego y realizando una buena presión en el medio campo que dificultaba las acciones del Leganés. Riki Rodríguez fue el primero en llevar peligro por parte de Burgos a los 11 minutos, en un error defensivo local, pero no apostó por pasar el balón a Juanma, que estaba libre de marca dentro del área.
Poco después, a los 19 minutos llegaba la jugada clave de peligro, por un manotazo de Grego Sierra en una acción previa al lanzamiento de una falta por parte del cuadro blanquinegro. El VAR intervino para revisar la jugada y el colegiado no dudó en enseñar tarjeta roja, quedando el Burgos con un jugador menos durante prácticamente todo el encuentro. Esta acción marcó el planteamiento del resto del encuentro, con un Burgos centrado en tareas defensivas y el Leganés adelantando posiciones en busca del gol.
El técnico, Julian Calero, decidió en ese momento la sustitución de Riki por Zabaco. En estas circunstancias, el guardameta Alfonso Herrero se convirtió en el mejor jugador del partido. Primero detuvo una gran acción en solitario de José Arnáiz, y poco después rechazó un remate de cabeza del mismo jugador, que había ganado la partida a la zaga burgalesa. Además, ya en tiempo de descuento, de nuevo Alfonso Herrero sacó un disparo de Perea, que amenazaba la integridad de la portería burgalesa.
Con empate sin goles se llegó al descanso.
La segunda parte comenzó con la entrada de Raúl Navarro y Guillermo, sustituyendo a Juanma y Alex Alegría, respectivamente. El partido prácticamente fue un monólogo del Leganés ante un Burgos muy metido atrás que prácticamente renunció al ataque. Juan Hernández puso el primer peligro para la portería burgalesa, con una buena intervención de Alfonso Herrero. A los 51 minutos, Quintillá tuvo otra ocasión para el equipo madrileño, pero su disparo se fue alto.
El Burgos buscaba un respiro, y Fran García al contragolpe logró rematar a puerta con un tímido disparo sin problemas para el portero.
El último tramo del encuentro fue de un esfuerzo tremendo para el Burgos, intentando frenar a un Leganés que buscaba el gol a la desesperada y con todos sus efectivos. Pese al dominio e intensidad del ataque madrileño, los burgaleses supieron aguantar de forma heroica hasta los 90 minutos y 5 más de descuento añadido por el colegiado.
No fue un gran partido en lo futbolístico para el Burgos, pero sí una prueba de fuego, de resistencia y buen hacer defensivo que el conjunto burgalés superó con buena nota. Un empate que sabe a victoria en un campo complicado y que supone el primer punto del Burgos en su vuelta al futbol profesional.
Y ahora, espera el Eibar en El Plantío el próximo domingo a las 22.00 h.
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