Se ha procedido al registro con autorización judicial de dos domicilios y un bar, interviniendo unos 24 gramos de cocaína y más de 500 pastillas del medicamento sildenafilo
Agentes de la Comisaría Provincial de Burgos han detenido a un varón residente en la ciudad, a quien se atribuye la comisión de un delito de tráfico de drogas, tras incautarle en el registro de dos domicilios y un bar tanto cocaína como un elevado número de pastillas del medicamento sildenafilo, más conocido por su principio activo como viagra.
La denominada operación 'Augusto' se iniciaba el pasado mes de junio, cuando la Policía Nacional de Burgos obtenía información sobre la supuesta actividad del investigado, quien se estaría dedicando a la venta de sustancias estupefacientes a diferentes consumidores.
Tras las distintas gestiones practicadas, los agentes antidroga constataban el hecho, además de cierta alarma social ante lo que suponía la existencia de un "punto negro" en el distrito sur, al que determinados consumidores acudían de manera periódica para proveerse de sustancias prohibidas.
Durante la investigación, se comprobó que el investigado estaría vendiendo no solo cocaína sino también pastillas contra la disfunción eréctil, en encuentros que sustanciaba tanto desde el bar que regentaba como desde su propio domicilio.
Así, agentes de la Policía Nacional provistos del oportuno mandamiento judicial, procedían el pasado miércoles 22 de octubre en presencia del investigado a la entrada y registro de dos domicilios y un bar, situados en el distrito sur de Burgos, teniendo como resultado la incautación de:
- Unos 24 gramos de cocaína
- 520 pastillas de sildenafilo
- Una báscula de precisión
- 100 euros en efectivo
Gracias a 'Augusto', los investigadores ponen en relieve dos aspectos:
- La neutralización de un nuevo "punto negro" de distribución y venta de drogas en Burgos.
- La alerta ante el hallazgo de tan elevada cantidad de sildenafilo, que consumido sin el estricto control y supervisión médica puede causar grave daño a la salud al no garantizarse su autenticidad, calidad ni condiciones de conservación. Su comercialización y uso están regulados y requieren prescripción médica.
El detenido, con antecedentes policiales por otros delitos, ya ha sido puesto a disposición de la Autoridad Judicial.