Los barrios de la ciudad se plantan y dicen no a las nuevas bases de organización de fiestas

Redacción BurgosNoticias 
26/02/2019 - 12:09h.

Hasta el pasado año era el Ayuntamiento el organizador de las fiestas de barrio, con lo que se le atribuían una serie de obligaciones al respecto. Sin embargo, el IMC ha aprobado este año unas nuevas bases de subvención de fiestas por las cuales, los barrios pasan a ser los organizadores de las mismas. En este sentido, se ha registrado un documento en el Ayuntamiento cuyo propósito es plantarse y negarse al cambio.

Uno de los principales puntos del escrito aclara que las fiestas de los barrios no son propias de las asociaciones, sino que son consideradas fiestas de ciudad y por ende, es el Ayuntamiento quien debe soportar las cargas y obligaciones del organizador.

Tales como el Plan de Emergencia o asuntos de salubridad, asuntos que, según el presidente de la asociación de vecinos de Villafría, Adolfo Díez, por capacidad no pueden sostener los propios barrios.

Mientras que el Ayuntamiento enfatiza en que este cambio es por ley, Díez aclara que no pueden suscribirse a esta idea, ya que "no son fiestas de asociaciones, sino de ciudad".

Con este nuevo plan no dejan salida a los barrios y les obligan a afrontar con su propio patrimonio la celebración de los festejos.

Toda esta problemática se remonta al año pasado, cuando los 7 barrios del distrito periférico pidieron al consistorio que aclarase qué tipo de responsabilidades derivaban de la contratación de actividades en las fiestas.

Pues bien, Díez señala que, no sólo no respondieron, sino que llevaron a cabo esta modificación a hurtadillas para desvincularse.
Por todo ello, cada días más barrios se unen a los 7 iniciales, a excepción del Barrio San Julián, que teme perder la subvención de sus fiestas ya celebradas, aunque sí ha mostrado su apoyo.

Asimismo, destaca que no se tienen ni recursos técnicos ni económicos para afrontar las responsabilidades y por ello, solicitan en el escrito regresar a las bases del año 2018.

"Se quieren organizar las fiestas, pero se necesita una capacidad que no tenemos ", apostilla.

Por ello, y puesto que el plazo de la convocatoria de subvenciones finaliza el 7 de marzo, sí van a suscribirse a ellas, pero con condiciones. "El Ayuntamiento tendrá que aceptar las alegaciones presentadas" ya que se niegan a ser los organizadores de las fiestas y a solicitar el uso de suelo público, cuando se trata de un asunto de ciudad.