El beneficio obtenido ilícitamente supera los 51.000 euros, habiéndose localizado a un total de 30 víctimas, 3 de ellas en Burgos
La Guardia Civil ha puesto a disposición judicial a 10 personas, de entre 20 y 30 años, como presuntas autoras, en distinto grado de participación, de los delitos de extorsión, blanqueo de capitales y pertenencia a grupo criminal; habiendo causado un perjuicio económico superior a los 51.000 euros.
Las actuaciones se encuadran en el marco de las operaciones BELLASEX, SEXTORBUR y BARSEBUR, desarrolladas por el Equipo de Investigación Tecnológica (EDITE) de la Comandancia de Burgos, e iniciadas a raíz de las denuncias presentadas por tres víctimas burgalesas, cuya manifestación permitió activar las primeras líneas de investigación y localizar a otros 27 perjudicados distribuidos por todo el territorio nacional.
Consecuencia de todo ello, se ha logrado poner fin a la actividad de tres redes que, aunque independientes entre sí, compartían una misma dinámica delictiva basada en la extorsión digital.
En el caso concreto de la Operación BELLASEX, el contacto se iniciaba a través de redes sociales, desde donde los autores utilizaban perfiles de mujeres jóvenes para, mediante mensajes directos, generar un entorno de confianza y empezar a enviar material supuestamente íntimo, buscando la reciprocidad de la víctima.
Una vez obtenían imágenes del perjudicado, iniciaban la fase de intimidación: simulaban enviar el contenido comprometedor a los contactos del afectado y exigían pagos inmediatos para evitar su difusión. Como resultado, los investigadores han logrado detener a 4 personas relacionadas con estos hechos en Cataluña.
Por su parte, la Operación SEXTORBUR reveló un entramado mucho más complejo, dado que el origen de los mensajes intimidatorios fue rastreado hasta República Dominicana, desde donde se llevaban a cabo las labores de captación y presión sobre las víctimas.
Mientras tanto, desde Sevilla y Ciudad Real, dos personas que también han sido puestas a disposición judicial, actuaban como "mulas digitales", recibiendo el dinero de las víctimas y reenviándolo al extranjero, quedándose, eso sí, con una parte como "comisión" por los servicios prestados.
Por último, la Operación BARSEBUR reveló otra variante de la sextorsión basada en la intimidación directa, canalizada a través de páginas de citas.
En este caso, las víctimas recibían mensajes de desconocidos, en los que se les acusaba de haber hecho perder el tiempo a supuestas mujeres vinculadas a la trama y, por ello, exigían pagos inmediatos bajo amenazas explícitas: aseguraban disponer de individuos que acudirían a cobrar la deuda a sus domicilios, incluso por la fuerza si era necesario.
En esta operación resultaron detenidos dos personas en Cataluña mientras que otros dos fueron puestos a disposición judicial tras ser localizados en Mérida y Sevilla.
Las diligencias instruidas ya han sido puestas a disposición de los respectivos juzgados competentes, si bien las investigaciones continúan abiertas, no descartándose la práctica de nuevas detenciones en un futuro.
La Guardia Civil remarca la importancia de denunciar y; para ello, pone a su disposición el número de teléfono 062 o si lo prefiere también el servicio gratuito de alertas para móvil app alertcops; cualquier información que desee facilitar o colaboración en el ámbito de la seguridad ciudadana, vial, de la ciberdelincuencia, del Patrimonio o medio ambiental es tratada de manera discreta y anónima.