La Junta de Castilla y León aprobará el próximo miércoles, 28 de abril, la eliminación del Impuesto de Sucesiones y Donaciones.
En este sentido, el procurador del Partido Popular por Burgos, Alejandro Vázquez ha señalado que este proyecto de ley impulsará, por una parte, el crecimiento económico y de empleo mediante la bajada de impuestos, y además favorecerá la fiscalidad de familias, autónomos y pequeñas y medianas empresas. "Se trata de eliminar uno de los impuestos más injustos ya que éste graba la transmisión de unos bienes que ya, por lo menos en alguna otra ocasión, han sido grabados por el impuesto."
Vázquez comenta que esta reforma se pretende llevar a cabo de dos maneras. La primera de ellas, a través de la bonificación del 99% en la cuota de las adquisiciones lucrativas mortis causa, y, en segundo lugar, a través de la bonificación del 99% en la cuota de las adquisiciones lucrativas intervivos.
La retirada de estos impuestos supondrá un ahorro fiscal de aproximadamente 35 millones de euros, y del que además se beneficiarán 15.000 personas. En la provincia de Burgos, concretamente, este ahorro fiscal se situará en los siete millones de euros.
Asimismo, Vázquez señala que aún quedan enmiendas vivas del dictamen de la Comisión de Hacienda y del Partido Socialista. "Estas enmiendas no son más que la muestra clara y evidente de la política que tiene el PSOE relativa a la subida de impuestos, intentando convertir nuestra Comunidad en un auténtico infierno fiscal."
En este sentido, el procurador del PP por Burgos destaca tres: la elevación del tipo máximo del impuesto del 34 al 37%, la reducción el patrimonio para tributar y la minoración de la reducción establecida de 400.000 euros a 250.000 euros.
"Evidentemente el Partido Socialista Obrero Español del fracasado señor Tudanca quiere castigar a los castellanos y leoneses con más impuestos y exprimir a las familias y a las pequeñas empresas" sentencia Vázquez.
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