“La novela erótica no es sólo sexo: son emociones, y no siempre buenas”

Redacción BurgosNoticias 
24/10/2015 - 19:28h.

Noe Casado escribe de erotismo. De sexo, pero también de emociones, de sentimientos, relaciones, victorias y derrotas. Noe Casado es una escritora burgalesa de novela erótica, un género que ha dejado de ser tabú para situarse en la primera línea de la creación literaria. Sus novelas, 50% eróticas y 50% románticas y el título de la última, 'No te pertenezco', es toda una declaración de intenciones.

"La pornografía no tiene nada que ver con la novela erótica. La pornografía se centra en la parte 100% física, mientras la erótica incluye la parte emocional. Hay gente que se queda únicamente con la parte física y, si le sirve, es perfecto, pero hay gente que quiere algo más". Para Noe Casado, la diferencia está clara, aunque los dos conceptos son válidos: "cada uno puede quedarse con el que más le guste... o a ratos uno y a ratos otro".

Sin embargo, esas emociones que forman la novela erótica no siempre son buenas: "Ojo, cuando digo emociones no hablamos de amor infinito y estas cosas de antes... no, las emociones pueden ser buenas, malas, regulares..."

Los personajes de sus novelas reflejan esas emociones. "Ahora las novelas tienen interacción y, aunque lo escriba una mujer, la 'partida' la pueden ganar personajes masculinos o femeninos". "Los roles sexuales cambiaron hace mucho. Si cogemos una novela romántica de hace 25 años, aparte de 'moñas', las posiciones estaban bastante marcadas". Los cambios sociales se reflejan en la literatura, como nos reconoce Noe Casado, aunque quedan muchos avances por hacer hacia la libertad sexual: "Igual que en la sociedad, por fin se ve un cambio. Aunque quedan algunas batallas por ganar, pero igual que se refleja una cierta igualdad y un cierto equilibrio en la sociedad, eso se nota en las novelas."

Sus personajes son complejos y nada tienen que ver con los estereotipos de la novela romántica clásica: "Había novelas en las que los personajes femeninos eran 'tontas del culo' y ellos más, porque las seguían".

Los personajes cambian según las necesidades de la escritora. Su última obra está ambientada en el Siglo XIX, por lo que hay que respetar "unas ciertas reglas de juego". "Siempre intento que mis personajes tengan cierta rebeldía, tanto los masculinos como los femeninos, para que resulten más atractivos. Si somos 100% fieles nos aburriríamos o no lo comprenderíamos. Un toque actual y un toque de rebeldía dan atractivo a la novela."

Su público es netamente femenino, aunque también tiene lectores hombres, pero "son más discretos, las mujeres en seguida se sacan un 'selfie', pero ellos te mandan sus felicitaciones por privado. También la mayoría de los autores en literatura erótica son mujeres.

"Estar en internet es fundamental, yo no podría editar mis libros sin internet. Hay una gran oferta, hay quien busca leer y hay quien busca contenido audiovisual". La novela erótica tuvo un gran 'boom' hace un par de años, aunque, como señala la autora, era fácil subir rápidamente porque se partía  desde muy abajo. "Ahora está más estable  y se mantiene en niveles normales, con una oferta y demanda igual que en otros géneros. Era muy fácil tener un despegue muy fuerte porque partíamos 'de menos cero'. Por modas, cuestiones editoriales o publicidad hay géneros que despegan, llegan al máximo y se estabilizan".