La Diputación Provincial de Burgos ha recibido a los cónsules de Indonesia y Filipinas, así como los importadores de dichos países y de Somalia. Estos forman parte del corazón del sudeste asiático y el Cuerno de África, que alberga más de 700 millones de personas y conforma la principal zona comercial más emergente del mundo.
El presidente de la Diputación, Borja Suárez, ha manifestado que, a través de Burgos Alimenta, se ha iniciado esta misión comercial del sudeste asiático con 43 productores del sector agroalimentario de la provincia de Burgos para estrechar lazos con otras regiones y mercados del planeta. Así, se internacionaliza el producto burgalés y nos permite ser receptores.
El importador de Somalia ha reseñado los desafíos que supone comercializar con un país como España, donde importan vino en un territorio islámico donde está prohibido su consumo. No obstante, a pesar de las dificultades que presenta, sostiene que el comercio es "dinámico".
Por su parte, la cónsul de la embajada de Filipinas, Monika Kamille, ha aseverado que desean ampliar y fortalecer el comercio entre países, pues el comercio entre España y la República de Filipinas está valorado en un billón de dólares; algo trivial, ya que en este país hay 118 millones de habitantes. Kamille ha subrayado los estrechos lazos que unen la República a España, donde han mantenido el catolicismo, una alimentación similar y, en buena parte, la cultura.
Asimismo, la importadora de Indonesia ha explicado que son 275 millones de habitantes y 14.000 islas y que, debido a que el 90% de su población es musulmana, la importación de alcohol está terminantemente prohibida. Sin embargo, ha apostado por introducir el mosto en el país, una bebida no alcohólica que ha propuesto importar bajo el término "halal", que señala una práctica dietética permitida en el mundo islámico.
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